Cuando uno piensa en *Madrid*, especialmente en la icónica Plaza Mayor, la primera imagen que viene a la mente suele estar saturada de turistas, sombreros de sol y comercios que ofrecen una experiencia no siempre auténtica. Sin embargo, entre toda esa vorágine turística, se encuentra un espacio que es todo un hallazgo para quienes buscan disfrutar de una comida o merienda en un ambiente especial. Hablamos del Café de la Plaza, una joya que hace justicia a una de las plazas más emblemáticas de la capital española.
Un diseño que cautiva
Ubicado en el Hotel Pestana, este sitio destaca no solo por su ubicación, sino por su diseño increíblemente acogedor. El espacio está dividido en dos áreas: un patio interior y una terraza exterior. El patio lleva la firma del diseño portugués clásico con una calçada portuguesa en blanco y negro, que forma figuras geométricas en el suelo, y tiestos de barro hechos a mano que complementan la celosía de hiedra. Todo esto, acompañado de un mobiliario de roble, latón y piel, crea un ambiente tan acogedor que invita a quedarse horas disfrutando.
La terraza exterior tiene su propio encanto, situada directamente sobre la Plaza Mayor. Este espacio no solo permite admirar la belleza arquitectónica de los alrededores, sino también disfrutar de la brisa y el dinamismo de la plaza.
La propuesta culinaria del chef Borja Veguillas
El alma culinaria del lugar es sin duda el chef Borja Veguillas. Con un amplio recorrido en el ámbito gastronómico que incluye prestigiosos restaurantes como El Chaflán y BiBo Madrid, Veguillas trae una carta que equilibra tradición con innovación. En su menú, las propuestas están diseñadas para compartir y disfrutar, fusionando técnicas y sabores tradicionales con un *toque* moderno.
Desde las irresistibles croquetas hasta el guiso de rabo de vacuno desmigado en pan brioche con mahonesa de chipotle, cada plato es una invitación a explorar la gastronomía madrileña en su máxima expresión. Los arroces individuales, que siempre son un acierto, completan una carta que despierta el apetito nada más verla.
Delicias para el postre
Si eres amante del dulce, el Café de la Plaza no te decepcionará. Sus postres son un reclamo en toda regla. Entre ellos destaca la torrija caramelizada acompañada de helado de vainilla, un verdadero orgullo de la cocina local. Pero si buscas algo diferente, el arroz cremoso estilo asturiano siempre sorprende.
La experiencia de merendar en el Café de la Plaza
Aquellos que buscan un lugar donde disfrutar de una buena merienda no quedarán indiferentes ante las opciones que ofrece este café. Las meriendas están disponibles de lunes a jueves entre las 16:00 y las 19:00 horas, y vienen en presentaciones dulces y saladas.
En el lado salado, puedes elegir entre un sándwich de paleta ibérica, queso y tartufo, o el clásico bocadillo de paleta ibérica en pan de masa madre. Para los que prefieren un toque dulce, las opciones de gofre belga con crema de avellanas y pancakes esponjosos con sopa de chocolate blanco son perfectas.
Siente Madrid desde otro ángulo
El Café de la Plaza ofrece mucho más que una simple comida o merienda. Es una experiencia que permite a los madrileños y visitantes redescubrir la Plaza Mayor desde una nueva perspectiva. La oferta gastronómica de calidad rompe con el estigma de las “paellas desabridas” y la “comida rápida” que a menudo invaden zonas turísticas.
Este café no solo es una opción para turistas, sino para aquellos locales que desean reconectar con su ciudad y disfrutar de un respiro dentro del bullicio. Ya sea que estés explorando Madrid como turista o buscando un rincón para escapar del ajetreo diario, el Café de la Plaza es un destino imperdible.
Para un local que no solo promete, sino que cumple con cada expectativa, el Café de la Plaza en el Hotel Pestana destaca como un espacio de encuentro entre la tradición culinaria madrileña y una experiencia gastronómica contemporánea.
