Sgún lo publicado por El Mundo en una de las habitaciones, el termómetro marca 55,1 grados, mientras que en uno de los pasillos, la pantalla muestra 52,8 grados. En una de las zonas de la planta alta, se registran 49,3 grados. Esta es la realidad que durante la última semana han enfrentado los trabajadores y los internos del centro de acogida municipal Puerta Abierta, ubicado en el distrito madrileño de Latina. Este centro, situado en una explanada junto al Hospital Fundación San José, presenta condiciones insostenibles debido a fallos recurrentes en su sistema de refrigeración.
Situación crítica para los internos
El centro, gestionado por la empresa Grupo 5 mediante una concesión del Ayuntamiento de Madrid, alberga a 130 personas. Estas personas han estado en situación de calle, son mayores, dependientes y sufren diversas patologías. Desde hace tres años, cada verano, experimentan problemas con el calor debido a fallos en el sistema de refrigeración que impiden que el aire acondicionado funcione adecuadamente. Este verano no ha sido la excepción y las temperaturas internas han superado los 50 grados, según las mediciones documentadas por los trabajadores.
Problemas persistentes en la climatización
En el Área de Políticas Sociales del Ayuntamiento de Madrid aseguran que desde ayer el aire acondicionado funciona con normalidad y que a lo largo de la semana se han producido incidencias puntuales con el climatizador que fueron subsanadas en el mismo día. Sin embargo, en el centro indican que, aunque los operarios de Ingesam, empresa encargada del mantenimiento, se desplazaron para arreglar los sistemas de climatización, las temperaturas aún son altas porque la avería es más profunda.
Necesidad de un sistema de aire acondicionado actualizado
Durante tres veranos consecutivos, la dirección del centro ha reclamado un cambio en la instalación que permita un sistema de aire acondicionado más actualizado. El centro de acogida, ubicado en mitad de una explanada en el barrio de Cuatro Vientos, carece de un aislamiento térmico adecuado para enfrentar las altas temperaturas que se registran en los veranos de la capital. Además, muchos de los internos en este recurso municipal padecen patologías respiratorias graves o incluso cáncer. «Esto es un cocedero y es peligroso para este tipo de personas que se tengan que enfrentar a temperaturas tan altas», señala uno de los trabajadores del centro.
Medidas temporales para paliar el calor
Para hacer frente a la situación, se ha propuesto adaptar el comedor, donde hay un pingüino climatizador, para que los internos puedan dormir en mejores condiciones. Esta medida, aunque paliativa, busca brindar un alivio temporal a las personas más vulnerables ante el intenso calor.
Red de recursos para personas sin hogar
Puerta Abierta forma parte de los cinco recursos para personas sin hogar que componen la red del Ayuntamiento de Madrid, gestionada por la empresa Grupo 5. Mientras que este centro se enfoca en personas mayores y dependientes, el de San Isidro y La Rosa, también gestionados por la misma compañía, se centran en personas en situación de calle cronificada. El centro Juan Luis Vives atiende a jóvenes y personas sin hogar con mayor autonomía, y el Beatriz Galindo se dedica a mujeres víctimas de violencia de género.
Impacto en la salud de los internos
El alto nivel de calor no solo afecta el bienestar general de los internos, sino que también tiene un impacto significativo en su salud. Las personas con patologías respiratorias y aquellos que sufren de enfermedades crónicas, como el cáncer, son especialmente vulnerables a las altas temperaturas. La exposición prolongada a estas condiciones puede agravar sus enfermedades y poner en riesgo su vida.
Respuesta de las autoridades
Las autoridades locales deben enfrentar esta crisis de manera urgente. Es imperativo implementar soluciones duraderas que garanticen un ambiente seguro y saludable para los internos. Las promesas de reparaciones temporales y soluciones parciales no han sido suficientes para abordar los problemas de fondo del sistema de climatización.
Propuestas para una solución definitiva
Una posible solución implica la renovación completa del sistema de aire acondicionado y la mejora del aislamiento térmico del edificio. Estas mejoras no solo reducirían las temperaturas internas, sino que también proporcionarían un entorno más confortable y seguro para los residentes. Además, se deben considerar opciones de ventilación adicionales y el uso de tecnologías más eficientes en términos energéticos para mantener el centro en condiciones óptimas durante todo el año.
La importancia de la planificación a largo plazo
Para evitar situaciones similares en el futuro, es crucial que el Ayuntamiento y la empresa concesionaria adopten una planificación a largo plazo. Esto incluye la realización de mantenimientos regulares y la actualización de los equipos de climatización antes de que comience la temporada de calor. Asimismo, se debe establecer un protocolo de emergencia para responder rápidamente a cualquier fallo en el sistema de refrigeración.
Una situación insostenible
La situación en el centro de acogida Puerta Abierta no puede continuar así. Las altas temperaturas y los fallos recurrentes en el sistema de climatización representan un riesgo grave para la salud y el bienestar de los internos. Es fundamental que se tomen medidas inmediatas y se implementen soluciones duraderas para garantizar un entorno seguro y saludable para todas las personas que dependen de este recurso municipal. La calidad de vida de los más vulnerables no debe comprometerse por falta de mantenimiento y previsión.