En el corazón del barrio de El Pilar, La Vaguada, el centro comercial más antiguo de España, ha experimentado una transformación radical que marca un nuevo capítulo en su historia. Cuatro décadas después de su apertura, este icónico complejo ha resurgido con una renovada vitalidad, más luminosa, silenciosa y sostenible que nunca. La profunda reforma, que comenzó en junio de 2023, ha convertido a La Vaguada en un referente no solo de consumo, sino también de innovación y respeto al medio ambiente.
Un Lifting que Respeta la Esencia de Manrique
La remodelación de La Vaguada no se limitó a cambios estéticos superficiales. El proyecto, encabezado por el estudio de arquitectura L35, ha logrado combinar modernidad y sostenibilidad sin perder la esencia del diseño original de César Manrique, quien dotó al centro de una identidad única. Los trabajos incluyeron la renovación de los tejados con material EFTE, un componente termoplástico transparente que, además de ser 100% reciclable, permite una mayor entrada de luz natural, reduciendo significativamente la necesidad de iluminación artificial y, por ende, la huella de carbono del edificio.
El auge de los centros comerciales: la inversión se sextuplica en el primer semestre de 2024
Las velas características de Manrique, que han sido la seña de identidad de La Vaguada desde su inauguración en 1983, también han sido renovadas. Estas estructuras simbólicas, que simulaban un barco, fueron desmontadas debido a su deterioro. Sin embargo, no se trató de una simple sustitución; se estudió cuidadosamente la posición de las nuevas velas para optimizar la entrada de luz natural en invierno y minimizar el impacto del sol en verano. Este detalle no solo preserva la estética del lugar, sino que también mejora la eficiencia energética.
Innovación en el Confort Acústico y Ambiental
Uno de los principales desafíos de la remodelación fue reducir la contaminación acústica dentro del complejo. Las paredes y techos del centro comercial, que abarca 85.000 metros cuadrados, han sido recubiertos con lamas de fibra de polímero, un material fonoabsorbente que ha logrado disminuir el ruido en un 47%. Esta innovación ha hecho que la experiencia de los visitantes sea más agradable, permitiendo que las conversaciones se mantengan sin tener que elevar la voz, un problema común en grandes superficies comerciales.
Oasiz Madrid: una revolución en el concepto de centros comerciales
Además, la Plaza Central de La Vaguada ha experimentado una transformación significativa. Ahora, los clientes pueden acceder fácilmente a la terraza ajardinada al aire libre, gracias a la instalación de dos nuevas escaleras mecánicas. Este cambio ha permitido que muchos visitantes descubran por primera vez la azotea del centro, que antes era menos accesible.
Nuevos Operadores, Nuevas Experiencias
La renovación de La Vaguada no solo se ha centrado en mejorar la infraestructura; también ha incluido una renovación en la oferta comercial. La salida de un operador tan emblemático como El Corte Inglés, lejos de ser un golpe duro, ha sido una oportunidad para atraer a nuevos actores en el mercado. IKEA, con una tienda de 12.000 metros cuadrados y un almacén de 600 metros para recogida de productos, ha sido una de las principales incorporaciones. Junto a ella, firmas tan potentes como Primark, MediaMarkt, Nike, Pull&Bear, y Create han abierto sus puertas en el centro, ofreciendo una amplia variedad de productos y servicios a los visitantes.
La llegada de nuevos operadores también ha traído consigo un cambio en el perfil de los visitantes. El regreso de la bolera Ozone y la apertura del gimnasio Fitness Park han atraído a un público más joven, mientras que Primark ha ampliado la zona de influencia de La Vaguada, atrayendo clientes de toda la región, incluidos aquellos de zonas más céntricas de Madrid.
Un Centro Comercial que Sigue Siendo del Barrio
Pese a las importantes incorporaciones, La Vaguada ha sabido mantener su esencia como un centro comercial «de barrio». Las tiendas tradicionales, como mercerías, clínicas dentales y centros de test psicotécnicos, conviven con las grandes marcas, creando un espacio que sigue siendo un punto de encuentro para los residentes de El Pilar. Jesús Hernández, subdirector del centro comercial, destaca que esta mezcla de lo nuevo y lo tradicional es lo que ha permitido que La Vaguada siga siendo el lugar donde los vecinos realizan sus actividades cotidianas, funcionando como una verdadera plaza pública.
Madrid endurece la regulación de locales comerciales transformados en pisos turísticos
Este sentido de comunidad se refleja en iniciativas como el campamento de verano gratuito que organiza La Vaguada para los niños del barrio. Durante el verano, treinta niños disfrutan de actividades en el centro, reforzando así el vínculo de La Vaguada con su entorno local.
Un Compromiso Continuo con la Innovación
Desde sus inicios, La Vaguada ha sido pionera en ofrecer experiencias innovadoras a sus clientes. Fue el primer centro comercial en Madrid en instalar multicines, espacios de ludoteca, salas de lactancia y hasta un estudio de radio. Estas innovaciones han sido clave para mantener la relevancia del centro a lo largo de los años.
Más recientemente, la carpa para gamers se ha convertido en una de las apuestas más exitosas de La Vaguada. Este espacio, que cuenta con grandes ordenadores y consolas, ofrece a los adolescentes la posibilidad de jugar en turnos de 45 minutos, mientras el público puede seguir las competiciones desde las gradas. La popularidad de este espacio ha llevado a su expansión, trasladándose a la terraza para aumentar su capacidad a 280 metros cuadrados.
Un Legado que Continúa Evolucionando
La Vaguada no es solo un centro comercial; es un símbolo de la evolución urbana y social del barrio de El Pilar. Desde su construcción en 1983, ha enfrentado retos y resistencias, pero ha sabido adaptarse y evolucionar para convertirse en el corazón del barrio. La reciente remodelación es solo el último capítulo en una historia de constante innovación y compromiso con la comunidad.
Con más de 25 millones de visitantes anuales, La Vaguada sigue siendo un referente en la vida comercial y social de Madrid, un lugar donde la tradición y la modernidad coexisten en perfecta armonía. La renovación no solo ha mejorado la experiencia de compra, sino que ha reforzado el papel de La Vaguada como un espacio comunitario, un verdadero oasis urbano que, cuarenta años después de su creación, sigue siendo tan relevante como siempre.