Madrid ha cerrado el mes de noviembre de 2024 con los niveles de dióxido de nitrógeno (NO₂) más bajos jamás registrados en la capital, consolidando un año histórico para la calidad del aire. Todas las estaciones de medición se situaron por debajo del límite actual de 40 μg/m³ establecido por la Unión Europea, y nueve de ellas ya cumplen con los más estrictos límites de 20 μg/m³ que entrarán en vigor en 2030. Este avance es el resultado directo de las medidas impulsadas por la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360, implementada desde 2022.
Reducción significativa de la contaminación
Los datos presentados muestran una mejora notable en la calidad del aire. En comparación con 2023, los niveles de NO₂ han disminuido un 16,6 %, y si se compara con 2019, la reducción alcanza el 35,9 %. Este progreso no solo demuestra la efectividad de las restricciones a los vehículos más contaminantes, sino también el compromiso de la ciudad con la lucha contra el cambio climático.
El caso más significativo es el de plaza Elíptica, históricamente uno de los puntos más contaminados de Madrid. En noviembre de 2019, esta estación registraba 54 μg/m³, mientras que en 2024 cerró el mes con solo 29 μg/m³, una disminución del 46,3 % en cinco años.
Un modelo de éxito: Madrid 360
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, destacó que el éxito de la estrategia Madrid 360 radica en su enfoque progresivo y multifacético. Entre las medidas más efectivas se encuentra la restricción a la circulación de turismos con clasificación ambiental A, que representan los vehículos más contaminantes. Estas limitaciones, vigentes desde 2022, han sido clave para acelerar la mejora del aire en toda la ciudad.
Madrid ha logrado cumplir por tercer año consecutivo con la directiva europea de calidad del aire, algo que antes de 2022 parecía inalcanzable. Durante más de una década, desde 2010 hasta 2021, la capital infringió de forma reiterada los límites europeos, acumulando episodios críticos de contaminación.
Un antes y un después en la calidad del aire
En 2017, considerado el peor año en términos de calidad del aire, 15 de las 24 estaciones de medición de Madrid superaron los 40 μg/m³ de NO₂. Este año marcó un punto de inflexión que llevó a implementar estrategias más estrictas. En 2024, todas las estaciones están por debajo de este límite, un cambio que refleja la efectividad de las políticas ambientales.
La evolución ha sido especialmente notoria en los episodios de contaminación. Durante 2024, no se ha activado el Protocolo por contaminación, algo que no ocurría desde 2021. Este protocolo, que regula la actuación en casos de alta concentración de NO₂, fue activado por última vez en diciembre de 2021 y anteriormente de forma frecuente en años como 2017, cuando estuvo activo durante 43 días.
Tarifa dinámica del SER: un respiro para los conductores
El descenso de los niveles de NO₂ también ha permitido que en 2024 no se haya activado la tarifa dinámica del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER). Introducida en enero de 2022, esta tarifa se aplica cuando las concentraciones de NO₂ superan ciertos umbrales. Sin embargo, los bajos niveles registrados durante este año han evitado que los conductores enfrenten incrementos en el coste del aparcamiento regulado, beneficiando tanto a la economía local como al medio ambiente.
Madrid, un ejemplo a seguir en Europa
La ciudad no solo ha cumplido con los estándares actuales, sino que se posiciona como un referente en la implementación de políticas ambientales efectivas. De cara a 2030, los límites establecidos por la nueva directiva europea serán aún más estrictos, con un máximo permitido de 20 μg/m³. Madrid ya está adelantándose a este desafío, con nueve estaciones que cumplen estos objetivos antes de tiempo.
Retos y objetivos a futuro
Aunque los avances son evidentes, el Ayuntamiento de Madrid no baja la guardia. El objetivo es mantener esta tendencia positiva y garantizar que todos los puntos de la ciudad cumplan con los límites más estrictos en los próximos años. Las medidas incluidas en Madrid 360 seguirán evolucionando para consolidar el compromiso de la ciudad con un aire más limpio y saludable.
En este contexto, la colaboración ciudadana es clave. Reducir el uso del coche privado, apostar por el transporte público y adoptar hábitos más sostenibles son pasos fundamentales para mantener y mejorar la calidad del aire. Madrid ya ha demostrado que es posible avanzar hacia un futuro más limpio y saludable. Ahora, la meta es consolidar estos logros y continuar siendo un ejemplo de sostenibilidad urbana.
Un aire más limpio para todos
El registro de noviembre de 2024 no solo marca un hito en la historia de Madrid, sino que también refleja cómo una gestión ambiental responsable puede transformar una ciudad. Con medidas innovadoras y el compromiso colectivo, la capital española sigue liderando el camino hacia un futuro más sostenible. La lucha contra la contaminación no termina aquí, pero los logros alcanzados este año son un claro indicador de que se está en el camino correcto.
