Madrid está en constante cambio, y una de las transformaciones más ambiciosas de la capital se está llevando a cabo en la estación de Chamartín-Clara Campoamor. Esta emblemática estación no solo es un punto de tránsito ferroviario, sino que ahora se prepara para convertirse en un nodo clave de movilidad sostenible, multimodal e inteligente. Con un ambicioso proyecto de ampliación y remodelación integral, Chamartín no será la misma.
El objetivo es claro: duplicar la capacidad de la alta velocidad, mejorar el flujo de viajeros y modernizar la infraestructura existente. Este proyecto no solo busca atender a los 36 millones de viajeros que pasaron por la estación en 2023, sino estar lista para los 55 millones que se esperan en 2030. La estación no solo crece en tamaño, sino en capacidad para gestionar hasta 900 trenes diarios, lo que representa un aumento del 25% al 30% en el número de viajeros de Cercanías.
Un nuevo Chamartín: más grande y moderno
La remodelación de Chamartín es un desafío técnico monumental, pero se está llevando a cabo sin interrumpir los servicios. La estación contará con un vestíbulo principal de 18,000 m² —el doble del tamaño actual— y 25 vías en total: 13 para servicios de la red convencional y Cercanías, y 12 para la alta velocidad. Este diseño permitirá un flujo más eficiente de trenes y pasajeros, asegurando que la estación pueda cumplir con las exigencias de una capital en crecimiento.
El vestíbulo central, que será el corazón de la estación, se ampliará para albergar tanto a viajeros de alta velocidad como a los de Cercanías, con áreas dedicadas para cada servicio. Además, contará con un gran pasillo longitudinal flanqueado por locales comerciales y zonas de embarque, todo diseñado para optimizar la experiencia del viajero. Por primera vez, los viajeros de Cercanías tendrán su propio espacio en la estación, con un sistema de control de accesos moderno.
Alta velocidad: más vías, más trenes
Chamartín fue concebida en los años 70 y contaba inicialmente con seis vías para alta velocidad. Sin embargo, el crecimiento de la demanda hizo evidente la necesidad de expansión. Se han transformado dos vías de ancho ibérico en vías de ancho estándar (UIC), y se han construido cuatro nuevas vías para alta velocidad. De esta manera, la estación estará preparada para gestionar un mayor número de trenes de alta velocidad, con andenes más amplios y marquesinas que protegerán a los pasajeros.
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Las cuatro nuevas vías, numeradas de la 22 a la 25, están listas y solo esperan la autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF) para entrar en funcionamiento. Estos andenes tienen una longitud de 420 metros, lo que permitirá la llegada simultánea de varios trenes, optimizando el espacio y mejorando la fluidez del tráfico ferroviario.
Cercanías: una estación más accesible
La ampliación de Chamartín también está enfocada en mejorar la experiencia de los usuarios de Cercanías. En febrero de 2023, Adif puso en servicio el vestíbulo central subterráneo, recuperando una zona en desuso desde los años 80. Esta nueva área conecta directamente los andenes de Cercanías con el metro y con el exterior, ofreciendo una salida directa a la calle Agustín de Foxá.
Durante el año 2023, Adif modernizó siete vías (1, 2, 9, 10, 11, 12 y 13) y remodeló cinco andenes. Estas mejoras incluyen la instalación de nuevos aparatos de vía y señalización, lo que permitirá aumentar la velocidad de circulación y hacer más eficiente la gestión de los trenes.
Además, se ha completado la instalación de una pasarela cubierta de 1.300 m² sobre las vías, permitiendo a los viajeros acceder de manera más rápida y cómoda a los andenes. Este nuevo espacio no solo facilita el tránsito, sino que también contribuye a consolidar un gran espacio diáfano y flexible en el vestíbulo principal.
La remodelación en marcha
En 2024, las obras continúan con la modernización de las vías que discurren por el túnel de Recoletos. Adif está instalando nuevos aparatos de vía y señalización entre las vías 6 y 13, y ampliando el vestíbulo principal, con el objetivo de finalizar la nueva pasarela de Cercanías sobre los andenes. Esta pasarela, destinada a los viajeros de Cercanías, permitirá un acceso más fluido a los trenes desde el vestíbulo central subterráneo.
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Una de las fases más avanzadas del proyecto ha sido la finalización de la ampliación del vestíbulo entre las vías 1 y 8. En julio de 2024, comenzó la última fase de esta obra, que consiste en extender el vestíbulo hacia el norte entre las vías 8 y 13. El acceso de los viajeros a los andenes de Cercanías y Media Distancia ahora se realiza exclusivamente desde el vestíbulo subterráneo, mientras que el vestíbulo principal se reserva para los servicios de alta velocidad.
Más allá de la estación: su impacto en el entorno urbano
No solo la estación se está transformando. El entorno urbano que rodea Chamartín también se verá beneficiado con esta ampliación. Un nuevo edificio de catering, con una superficie de 1.300 m², ha sido construido para mejorar los servicios de restauración a los trenes. Además, Adif está ejecutando un nuevo paso subterráneo que conectará las vías 13, 14 y 15 de alta velocidad, dotado de ascensores y escaleras mecánicas.
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Este paso subterráneo permitirá a los viajeros acceder de manera directa desde los trenes de alta velocidad a las estaciones de Cercanías y Metro, mejorando considerablemente la conectividad y facilitando el flujo de pasajeros entre los diferentes modos de transporte.
Hacia una movilidad más eficiente y sostenible
Con una inversión que supera los 540 millones de euros, la remodelación de Chamartín-Clara Campoamor no solo está transformando una estación, sino todo un concepto de movilidad en Madrid. Este proyecto ambicioso responde a la necesidad de crear un transporte más eficiente, sostenible y conectado. El futuro de Chamartín está orientado a convertirse en un referente de la movilidad multimodal, integrando trenes, metro y servicios de larga distancia en un solo espacio.
Chamartín: el corazón transformado de Madrid que late con historia y modernidad
En los próximos años, Madrid contará con una de las estaciones más modernas y avanzadas de Europa, capaz de gestionar millones de viajeros y cientos de trenes diarios, mientras sigue siendo un eje fundamental en la conectividad ferroviaria del país.