Si hablamos del mundo laboral y la importancia de la equidad y transparencia, nos damos cuenta que cada vez cobra más importancia. Sin duda, herramientas como el registro retributivo y la auditoría retributiva han ganado protagonismo en el entorno laboral, sin embargo, a menudo se confunden ambos conceptos.
Debes saber que estas herramientas tienen objetivos y aplicaciones diferentes, aunque complementarios.
La legislación laboral española, en especial el Real Decreto 902/2020, establece la obligación para las empresas de garantizar la igualdad retributiva entre mujeres y hombres. Dentro de este marco, el registro retributivo y la auditoría retributiva son fundamentales para cumplir con la normativa y evitar sanciones.
¿Qué diferencias hay entre registro retributivo y auditoría retributiva?
La diferencia principal es el uso y enfoque de cada herramienta, no solo para cumplir la ley sino también para construir entornos más equitativos y sostenibles.
El registro retributivo es una herramienta descriptiva que se limita a recopilar y estructurar la información salarial, mientras que la auditoría retributiva es analítica y estratégica; ya que no solo identifica brechas salariales, sino que también examina sus causas y propone medidas correctivas.
Para comprender mejor cada una de ellas, analizamos qué es, cuáles son sus elementos y qué alcance tienen.
¿Qué es el registro retributivo?
El registro retributivo es un documento que recoge todos los salarios, complementos y percepciones extrasalariales de los trabajadores, desglosados por sexo y distribuidos según categorías profesionales o puestos de trabajo. Su objetivo es ofrecer una visión clara y transparente de la estructura salarial de la empresa.
Todas las empresas están obligadas a tener un registro retributivo actualizado (hay que revisarlo al menos una vez al año o cuando haya cambios significativos en la estructura salarial).
Este registro salarial no debe ser público, pero sí debe estar disponible para los representantes legales de los trabajadores. Toda esta información ayudará, no solo a la transparencia, sino también a la prevención de desigualdades antes de que se conviertan en problemas graves.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de auditoría retributiva?
La auditoría retributiva va más allá de un registro de datos. Consiste en un análisis detallado que identifica posibles brechas salariales, examina las causas subyacentes y propone medidas correctivas. Es una herramienta clave para implementar planes de igualdad efectivos.
En este caso, solo las empresas con más de 50 empleados están obligadas a realizar la auditoría retributiva junto al plan de igualdad.
En una auditoría retributiva se analizan:
- Brechas salariales entre hombres y mujeres.
- Políticas retributivas y su impacto en la igualdad.
- Medidas correctivas necesarias para equilibrar las diferencias detectadas.
La auditoría no solo cumple con la ley, sino que también fomenta un ambiente de trabajo más equitativo. Además, fortalece la reputación de la empresa al demostrar su compromiso con la igualdad.
A pesar de las diferencias, el registro retributivo y la auditoría retributiva tienen un impacto en la cultura organizacional
Tanto el registro como la auditoría retributiva son herramientas que no solo cumplen una función legal, sino que también fortalecen la cultura de igualdad en las empresas. Esto repercute positivamente en la moral de los empleados y la reputación corporativa.
El registro retributivo y la auditoría retributiva son pilares fundamentales para garantizar la igualdad salarial en las empresas. Aunque tienen diferencias claras en sus objetivos y metodología, juntas forman una estrategia integral para promover la transparencia y la equidad. Invertir la correcta implementación del registro retributivo y la auditoría no solo es cumplir con la ley, sino también apostar por un futuro más justo en el ámbito laboral.